INDALMA, una gran familia de pequeños negocios llegó a la escena mundial simultáneamente con la crisis medioambiental y del petróleo. Los miembros de la familia inventaron y patentaron en 2002 una turbina hidroeléctrica, de fácil manejo, bajo mantenimiento, bajo coste y capacidad operativa en aguas poco profundas (mínimo de 4 metros).
Desde el año 2000 INDALMA ha instalado 80 mini turbinas hidroeléctricas en granjas privadas y en 45 comunidades rurales con un éxito completo, y mínimos costes de mantenimiento e impacto medioambiental.
Pequeñas presas de tierra, como máximo de 9 metros de alto, son construidas cerca de pequeñas fuentes de agua formando charcas o pequeños lagos. Desde una salida de cemento, el agua es suministrada a las turbinas localizadas en la base de la presa, que a su vez activan los generadores tradicionales. Desde la central la energía estable, de primera y tercera fase, es distribuida en todas las direcciones a distancias de 30 kilómetros.
Una asociación local gestiona el proyecto. Las personas son formadas para mantener la desembocadura limpia, lubricar las turbinas, leer los medidores de consumo eléctrico, y facturar a la gente. Todos los beneficios son reinvertidos en proyectos de la comunidad. Una vez construida, hay muy poco coste de mantenimiento.
En septiembre de 2005 la municipalidad de Santarem entró en partenariado con INCRA, un Instituto Federal de Reforma del Suelo, para construir 6 mini plantas hidroeléctricas, proporcionando electricidad a 1.890 familias en áreas aisladas de Santarem.
Más información en: http://habitat.aq.upm.es/dubai/08/bp2096.html
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